Haz esta oración antes de dormir y deja que Dios te hable en sueños.
Amado Dios, en esta noche me acerco a Ti con el corazón abierto, con la certeza de que Tú escuchas cada palabra que nace desde lo más profundo de mi alma.
En la quietud de esta noche, cuando el mundo se sumerge en el silencio, elevo mi voz para agradecerte por este día que me has permitido vivir, por cada momento, por cada prueba y cada bendición.
Tú eres mi refugio, mi roca firme, mi paz en medio de la tormenta.
Padre celestial, mientras me dispongo a descansar, te entrego todas mis preocupaciones, mis angustias y mis cargas.
Sé que en Tus manos todo se transforma, que Tú puedes convertir el cansancio en renovación, la incertidumbre en confianza y el miedo en valentía.
Lléname de Tu presencia, Señor, para que mi descanso sea reparador, para que mis sueños sean llenos de revelaciones divinas y mi despertar sea con un corazón renovado en fe y esperanza.
Virgen María, Madre de amor y ternura, cúbreme con Tu manto en esta noche.
Acoge en Tu regazo mis anhelos y mis temores, intercede por mí ante Tu Hijo, para que Su paz descienda sobre mi hogar, para que mi descanso esté lleno de la dulzura de Su amor.
Madre bendita, acompaña mis sueños, ilumina mi mente con pensamientos de bondad y guía mi corazón para que, al despertar, mi vida refleje la gracia de Dios.
Señor, que esta noche sea un tiempo de restauración para mi cuerpo, mi mente y mi alma.
Que cada célula de mi ser sea fortalecida por Tu amor, que cada pensamiento sea alineado con Tu voluntad, que cada susurro de mi corazón sea una alabanza a Tu nombre.
No permitas que la angustia invada mi descanso, no dejes que el enemigo siembre dudas o temores en mi alma.
En Ti confío, Señor, porque sé que en Tu abrazo encuentro seguridad.
Padre bueno, protege a mi familia en esta noche.
Que cada uno de nosotros sienta la dulzura de Tu presencia, que ningún peligro se acerque a nuestro hogar, que ninguna preocupación nos robe la paz.
Envía a Tus ángeles para que nos guarden, para que sean centinelas de nuestro descanso, para que nos cubran con sus alas y nos envuelvan en la certeza de que Tú estás con nosotros en todo momento.
Señor, en esta noche pongo en Tus manos mis anhelos y proyectos.
Si es Tu voluntad, guíame por el camino correcto, ilumina mi sendero y muéstrame las oportunidades que has preparado para mí.
Abre mi corazón a Tus enseñanzas, dame la paciencia para esperar en Tu tiempo perfecto y la valentía para aceptar Tus designios con amor y gratitud.
Dios misericordioso, te pido también por quienes no tienen un lecho donde descansar, por los que enfrentan noches de soledad, de hambre, de angustia.
Ten piedad de ellos, Señor, y llévales consuelo.
Que en medio de sus dificultades sientan Tu amor, que no se sientan abandonados, que cada uno de ellos encuentre alivio en Ti.
Usa mis manos, mi voz y mi vida para ser instrumento de Tu paz y amor en este mundo.
Madre Santísima, vela por los enfermos en esta noche.
Acompaña a quienes luchan contra el dolor, calma su sufrimiento, llénalos de fortaleza y esperanza.
Intercede ante Dios para que su descanso sea profundo, para que sus cuerpos sean restaurados y para que sus corazones sean inundados por la confianza en Su misericordia.
Madre de amor, acaricia con Tu ternura a cada hijo Tuyo que hoy clama por sanación.
Señor, en esta noche también quiero pedirte que mi mente sea guardada de pensamientos negativos, de inquietudes innecesarias, de recuerdos que hieren.
Que mi alma pueda sumergirse en la paz que solo Tú puedes dar, que cada sueño sea una manifestación de Tu amor y que al despertar mi corazón esté lleno de gratitud y gozo.
Que cada día que me concedas sea una oportunidad para acercarme más a Ti.
Gracias, Padre, porque sé que esta oración no queda en el aire, sino que llega hasta Tu trono de gloria.
Gracias porque en este momento siento Tu abrazo, porque sé que Tus ojos me miran con amor, porque sé que Tus manos me sostienen y que en Tu corazón hay un lugar especial para mí.
Me entrego a Ti con confianza, con la seguridad de que mañana será un nuevo día lleno de bendiciones y oportunidades.
Virgen María, toma mi descanso en Tus manos y preséntalo a Dios.
Que esta noche mi alma descanse en la certeza de que estoy protegido por el amor divino.
Que mi sueño sea ligero y profundo, que mi espíritu reciba nuevas fuerzas y que mi corazón se llene de paz.
Madre amada, en Ti confío, en Tu intercesión me refugio, en Tu amor descanso.
Señor, que esta noche sea un espacio sagrado donde Tu presencia me envuelva, donde mi alma encuentre calma y donde mi espíritu sea renovado.
Que en cada latido de mi corazón haya un susurro de gratitud hacia Ti, que cada respiración sea un recordatorio de Tu fidelidad y que cada sueño sea una manifestación de Tu amor.
En el nombre de Jesús, con la intercesión de la Virgen María, descanso en paz. Amén.
Enviado por: Dulce María. (México).
Haz esta oración antes de dormir y deja que Dios te hable en sueños.
