¡Reza AHORA a la Virgen de la Medalla Milagrosa y algo INCREÍBLE pasará hoy!

¡Reza AHORA a la Virgen de la Medalla Milagrosa y algo INCREÍBLE pasará hoy!

Si escuchas esto hoy, no es casualidad.

La Virgen Milagrosa tiene un mensaje PARA TI. ¡No cierres este video hasta el final o perderás la bendición que esperabas!

Si hay una lucha que parece interminable, una noche que no acaba, una puerta que se resiste a abrirse, ¡esto es para ti!

La Virgen de la Medalla Milagrosa está aquí para recordarte que Dios nunca llega tarde.

Él conoce el momento exacto en que tu fe, mezclada con esta oración, hará estallar lo imposible.

¿Sientes ese calor en el pecho? Es el Espíritu Santo confirmándote:

«Hoy es tu día de victoria».

¡No pierdas esta oportunidad!

Abraza esta oración como si fuera un salvavidas, porque lo es.

¿Listo para un milagro?

Esta oración a la Virgen de la Medalla Milagrosa ha cambiado miles de vidas.

¡Reza con FE y espera lo INCREÍBLE!

¡Padre Celestial!

En este momento sagrado, con el corazón latiendo de emoción y los ojos llenos de lágrimas de esperanza, me arrodillo ante Ti sabiendo que estás a punto de hacer lo imposible.

Virgen de la Medalla Milagrosa, ¡te invoco con fuego en el alma!

Tú que eres la Madre del Amor, la Reina de los Milagros, la que aplasta serpientes y abre puertas cerradas, ¡escúchame hoy!

Sé que estás aquí, porque siento tu presencia como un abrazo cálido que calma mis temores.

¡Oh María, concebida sin pecado!

Ruega por nosotros que recurrimos a ti.

En este instante, levanto mis manos vacías pero llenas de fe, porque sé que Tú y el Padre llenaréis lo que falta.

¡Hoy clamo por un milagro!

No un milagro cualquiera, sino uno que haga temblar los cimientos de mi vida, uno que los incrédulos no puedan negar, uno que escriba en mi historia:

‘Dios actuó aquí’.

Virgen Santísima, Tú que eres el refugio de los pecadores y la esperanza de los desesperados, ¡presenta mi súplica ante el trono de Dios!

Sé que estás tejiendo en lo invisible aquello que mis ojos pronto verán.

Hoy declaro con fe inquebrantable:

¡Mi milagro ya está en camino!

Si estás viendo esto, NO ES CASUALIDAD.

El Espíritu Santo te guio aquí porque hay una promesa divina con tu nombre. ¡No abandones esta oración! Cada palabra es combustible para tu milagro.

¡Mira a tu alrededor!

Las cadenas se rompen, las enfermedades huyen, las deudas se cancelan, las familias se restauran.

¡Es el poder de la Medalla Milagrosa!

Visualiza esto contigo: Mañana despertarás con una noticia que te hará gritar de alegría. Alguien te dirá: ‘No sé cómo pasó, pero es un milagro’.

La Virgen ya está moviendo los hilos.

¿Sientes ese escalofrío?

Es la confirmación.

¡ALGO GRANDE VIENE!

Repite conmigo ahora: ‘Virgen Milagrosa, yo creo.

Confío en ti.

Entrego mis angustias, mis sueños, mis batallas.

¡Haz en mí según la voluntad de Dios! Amén’.

Aquí viene lo más PODEROSO: Si crees que esta oración tocó tu corazón, escribe en comentarios

‘María, mi Madre, yo confío’.

¡Los testimonios reales empezarán a fluir! Porque hoy es el día de tu milagro. ¡COMPARTE esto y verás la mano de Dios moverse como nunca! ¡Amén!.

Antes de que termines, repite con voz firme: «María, Madre mía, yo acepto el milagro que Dios ya preparó para mí.

Lo recibo con gratitud y lo compartiré al mundo para que todos glorifiquen al Padre». Ahora, escribe «AMÉN, yo creo»

¡La cadena de bendiciones acaba de comenzar!

¡Y recuerda! Si dudas, mira hacia atrás: Dios siempre ha estado allí. Si caes, Él te levanta. Si lloras, Él enjuga tus lágrimas.

Esta oración es el puente entre tu lucha y tu milagro.

¡No lo dejes pasar!

La Virgen te sonríe en este instante… ¿responderás a su llamado? Amén.

Enviado por: Dulce María.

¡Reza AHORA a la Virgen de la Medalla Milagrosa y algo INCREÍBLE pasará hoy!