🔥🙏 Este es el MILAGRO más GRANDE de la HISTORIA 🙏🔥
Amado Dios, Padre todopoderoso, hoy elevo mi oración con el corazón lleno de gratitud y asombro por el milagro más grande de la historia: la Anunciación.
En ese instante sagrado, cuando enviaste al Arcángel Gabriel para proclamar Tu voluntad, elegiste a María, la más pura entre todas las mujeres, para ser la Madre de Tu Hijo y traer la salvación al mundo.
Señor, qué maravilla es contemplar ese momento en el que la humanidad recibió la esperanza, el amor hecho carne, la luz que disiparía para siempre las tinieblas del pecado.
Virgen Santísima, Madre de Dios y Madre nuestra, hoy me acerco a Ti con humildad, con el mismo espíritu de entrega con el que respondiste al llamado divino.
«He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según Tu palabra»—qué fe tan grande, qué amor tan puro.
Enséñame, Madre, a decir sí a Dios en cada momento de mi vida, a aceptar Su voluntad con confianza y alegría, sin miedo ni dudas.
Señor, en la Anunciación nos revelaste que todo es posible cuando confiamos en Ti.
Que así como María fue colmada de gracia, también podamos recibir Tu amor infinito y ser transformados en instrumentos de paz, humildad y servicio.
Que nuestra alma se llene de gozo como la de María, que nuestro corazón se abra sin reservas para recibir a Cristo, y que nuestra vida refleje la luz de Tu amor.
Padre amado, hoy te pido por todas aquellas personas que necesitan recibir buenas noticias, por aquellos que anhelan un cambio, una esperanza, una nueva oportunidad.
Así como enviaste a Gabriel con un mensaje de salvación, envía ahora a Tus ángeles para anunciar Tu amor en cada rincón del mundo.
Que nadie se sienta solo, que nadie pierda la fe, que todos experimentemos la certeza de que Tú nos acompañas y nunca nos abandonas.
Madre María, intercede por nosotros para que sepamos responder con valentía y humildad al llamado de Dios en nuestras vidas.
Ayúdanos a confiar en Su plan, incluso cuando no lo entendamos, incluso cuando parezca difícil.
Tú, que llevaste en Tu vientre al Salvador, enséñanos a llevar a Jesús en nuestro corazón y compartir Su amor con el mundo entero.
Señor, así como llenaste de gracia a María, derrama ahora Tu bendición sobre cada familia, sobre cada hogar que anhela paz y armonía.
Que aprendamos de la Sagrada Familia de Nazaret a vivir en amor, en unidad y en oración.
Que nuestros corazones sean templos vivos de Tu presencia y que nuestras palabras y acciones reflejen la dulzura y ternura de María.
Padre misericordioso, en este día de la Anunciación, te entrego mis miedos, mis dudas y mis preocupaciones.
Dame la fe de María, para confiar sin reservas en Tu plan perfecto.
Dame la humildad de María, para aceptar con alegría todo lo que dispongas para mi vida.
Dame la fortaleza de María, para enfrentar cada prueba con la certeza de que Tú caminas a mi lado.
María, Madre del Verbo Encarnado, ruega por nosotros para que aprendamos a decir sí al amor, sí a la misericordia, sí a la voluntad de Dios.
Que cada día, en cada decisión, en cada acción, podamos ser reflejo de esa entrega absoluta con la que recibiste a Jesús en Tu vientre.
Que nunca nos apartemos de Él y que sepamos reconocer Su presencia en lo cotidiano.
Dios de amor, así como la Virgen María llevó a Jesús en su seno, permítenos también ser portadores de Cristo en el mundo.
Que nuestras vidas sean testimonio vivo de Su luz, que cada palabra y cada obra sean una alabanza a Tu nombre.
Que así como María visitó a su prima Isabel para compartir la alegría del Salvador, nosotros también llevemos esperanza y consuelo a quienes más lo necesitan.
Señor, que la Anunciación nos recuerde que Tu plan es perfecto, que siempre trabajas en favor de los que Te aman, que aún en los momentos de incertidumbre, Tu amor nos sostiene.
Que podamos vivir con el gozo de saber que Jesús vino al mundo para salvarnos, y que María, con su sí incondicional, nos enseñó el camino de la verdadera fe.
Gracias, Padre celestial, por elegir a María, por regalarnos una Madre tan dulce y amorosa, por darnos a Jesús, el Salvador.
Gracias porque a través de este misterio nos muestras que nunca estamos solos, que siempre caminas con nosotros y que Tu amor es la respuesta a todas nuestras preguntas.
Hoy consagramos nuestra vida a Ti, Señor, y nos ponemos bajo el manto protector de la Virgen María. Que ella nos guíe, nos cuide y nos lleve siempre a los brazos de Su Hijo.
Que la Anunciación sea para nosotros un recordatorio de que Tu amor es más grande que cualquier temor, que Tu voluntad es perfecta y que, al confiar en Ti, recibimos la mayor bendición de todas: la paz que solo Tú puedes dar.
En el nombre de Jesús, con la intercesión de la Virgen María, elevamos esta oración con fe y esperanza. Amén.
Enviado por: Dulce María. (México).
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