Antes de dormir esta noche detente un momento.
Haz esta oración y siente cómo tu ángel te cubre con sus alas esta noche.
Esta noche, no te vayas a dormir sin hablar con el Cielo.
No importa lo que haya pasado hoy… tu alma necesita descanso, paz y protección divina.
Esta oración es un susurro directo al corazón de tu ángel guardián.
Siente cómo te abraza, cómo aleja tus miedos y cómo te llena de serenidad antes de cerrar los ojos.
Tal vez tu mente está agitada, tal vez sientes angustia…
Pero si oras con fe, esta noche será distinta.
Dormirás en paz, protegido por la presencia de Dios y de su ángel que nunca se separa de ti.
Reza con calma. Repite cada palabra. Deja que esta oración te arrulle el corazón.
Tu ángel está contigo… y esta noche lo vas a sentir como nunca antes.
Señor, esta noche vengo a ti con el corazón en silencio.
El día termina y solo tú sabes lo que he vivido, lo que callé y lo que cargué.
Antes de cerrar mis ojos, quiero hablar contigo y entregártelo todo.
Te pido, Padre bueno, que envíes a mi ángel guardián a cubrirme esta noche.
Que sus alas me rodeen, que su luz me proteja y que su presencia me dé la paz que tanto necesito.
Hay pensamientos que no me dejan dormir, miedos que me visitan en la oscuridad,
pero esta noche no quiero dejar espacio para la angustia, sino para tu paz.
Tú me prometiste que no estoy solo, que has enviado ángeles a cuidarme.
Y hoy, más que nunca, deseo sentir esa verdad en lo más profundo de mi alma.
Mi ángel, enviado por Dios, quédate conmigo.
Si el enemigo ronda en la noche, ahuyéntalo.
Si mis pensamientos se llenan de tristeza, consuélame.
Si mis sueños se nublan de ansiedad, ilumínalos con fe.
Toma mi habitación, cúbrela de luz, de silencio sagrado,
y convierte este espacio en un refugio celestial donde pueda descansar sin temor.
Dios mío, limpia mi corazón de todo lo que me pesa.
Sana las heridas de este día, los errores que cometí, las palabras que me dolieron.
Y si algo no pude resolver, te lo entrego para que tú lo hagas en tu tiempo.
No quiero dormir con enojo ni con culpa,
sino con la certeza de que tu misericordia me envuelve,
de que tu amor me perdona, y de que tus ángeles velan por mí.
Si esta noche tú me hablas en sueños, quiero escucharte.
Si hay algo que necesitas mostrarme, abre mis sentidos espirituales.
Y si simplemente debo descansar… que lo haga sabiendo que tú estás a mi lado.
Gracias por este día, con sus luces y sus sombras.
Gracias por tu paciencia conmigo.
Gracias por las pequeñas bendiciones que a veces no sé ver.
Ahora que el mundo se apaga, que mi alma se encienda en tu presencia.
Ahora que el ruido se va, que tu voz sea lo único que permanezca.
Mi ángel, quédate conmigo.
Dame sueños de paz, de esperanza, de futuro.
Y si algo me inquieta al despertar, que sea solo el deseo de vivir un nuevo día tomado de la mano de Dios.
Te entrego esta noche, Señor.
Te entrego mi mente, mi cuerpo, mi espíritu.
Hazme descansar como un hijo que sabe que su Padre lo cuida mientras duerme.
Y cuando amanezca, que me levante renovado, fortalecido,
y seguro de que no importa lo que venga… tú siempre estarás conmigo. Amén.
Enviado por: Dulce María (México).
Antes de dormir esta noche haz esta oración y siente la presencia de tu ángel.